Hetairas, cortesanas de la antigua Grecia

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La prostitución sagrada

A diferencia de lo que pueda parecer, la prostitución, era una institución sagrada y distinguida en la mayoría de culturas antiguas y es que aun a día de hoy sigue latente en algunas zonas de Nepal, India y en ciertas tribus o clanes de África occidental y Argelia . 

Puede parecer sorprendente que en la Antigüedad se ligara religión con prostitución, y es que la Biblia lo sigue considerando como un acto impuro. En la Antigua Grecia sin embargo, se refleja esta unión por el culto a Afrodita, la diosa del amor, la sensualidad y el placer. Podemos entender pues, que las cortesanas fueran las más devotas de esta diosa y que en ella encontrarán sus poderes.

A las cortesanas se las consideraba las mujeres más libres de Grecia y se situaban en la élite cultural y social

En aquella época había mucha distinción social entre hombres y mujeres. Lo curioso es que en el caso de las cortesanas todo cambiaba; se las consideraba las mujeres más libres de Grecia, disponían de independencia económica y estaban situadas en la élite cultural y social . 

Hetairas, eternas cortesanas

Las sacerdotisas de Afrodita, también conocidas como Hatarias o Heteras, eran las únicas mujeres que tenían acceso a una formación. A diferencia del resto de mujeres las Hetairas recibían lecciones de lectura, escritura, música y danza en los templos de la diosa. También adquirían algunas lecciones sobre medicina ya que una de sus labores era sanar a los hombres de su dolor físico y emocional. 

De este modo se convertían en mujeres cultas, que participaban en tertulias de filosofía y política. Eran musas de pintores y escultores, se las conocía como propagadoras e inspiradoras de la belleza. Ellas eran las que satisfacían las pulsiones sexuales e intelectuales de los hombres. 

Las fiestas favoritas de los griegos se celebraban para saciar los apetitos de la mente y los sentidos. Las cortesanas tenían un papel esencial en estas escenas de symposium y banquetes. Las Hetairas sorprendían a los hombres con su goce artístico, cantando, bailando, tocando algún instrumento o realizando malabares. En estas fiestas también se debatía sobre filosofía, arte y política. Hoy, podemos ver reflejadas estas escenas en las diferentes cerámicas griegas.  

En la Antigua Grecia los matrimonios eran pactados por diversos intereses, por este motivo muchas de las relaciones amorosas se daban en el ámbito extramatrimonial. Y al igual que hoy, muchos hombres confesaron haberse enamorado de estas mujeres maestras de las artes amatorias.

El mismo Socrates confiesa en el Diálogo del Banquete que todo lo que conoce sobre la naturaleza del amor se lo enseñó una compañera de Afrodita..

[ La prostitución sagrada, es también conocida como: prostitución religiosa, prostitución ritual , o prostitución templaria ]

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