dominación femenina postura del sometido

Dominación Femenina, la postura del sometido

FemDom, El Sometido

Hay varias posturas dentro del kamasutra que implican la absoluta dominación de la situación por parte de la mujer. Una de ellas es la del sometido, sin duda, una opción ideal para aquellos hombres que el FemDom (Feminine Domination) les pone y mucho.

Para hacer esta postura, el hombre tiene que estar acostado boca arriba y la mujer sentada encima de él a la vez que le da la espalda. De este modo el hombre tiene una visión directa de sus glúteos y esto le excitará muchísimo.

Para que esta postura todavía resulte más erótica, la mujer tendrá que ladear la cabeza y asomar la mirada por encima del hombro para mirarle, así conseguirás aumentar su tensión sexual.

Una de las ventajas de esta posición es que el dominio que se ejerce sobre el hombre es tal que es la propia mujer la que elige lo profunda que resultará la penetración. De este modo, si la mujer así lo quiere puede llegar a serlo mucho, por lo que le ofrece mucho placer al hombre.

dominacion femenina, postura el sometido

Otro punto muy excitante dentro de esta postura que el hombre puede acariciar los senos de su pareja para estimularla y que todavía la experiencia sea aún más placentera. No obstante, hay que tener en cuenta que lo más importante es dar rienda suelta a la imaginación para lograr así disfrutar plenamente de tu sexualidad.

Dominación Femenina

Como te puedes imaginar, el morbo de esta postura radica, especialmente, la dominación que uno de los dos ejerce sobre el otro. En este caso sería la dominación que la mujer ejerce sobre el hombre. Se trata de una postura que está pensada para aquellas personas que adoran la dominación así como controlar la acción y la dosis de placer de su compañero. Gracias a esta postura es la mujer la que marca los límites del encuentro

Por ejemplo, se puede empezar deleitando al chico con caricias, besos y lamidas eróticas por todo el cuerpo para luego colocarse encima de él, tomar el pene con su mano e iniciar la penetración.

Sin duda, esta es una de las posturas más útiles del Kamasutra si lo que se desea es variar en la cama y no caer en la rutina y relaciones monótonas. Así cada día uno será el que lleve las riendas del encuentro sexual que viviréis. La clave para pasarlo bien está en saber qué le gusta al otro y cómo complacerle.

COMPARTIR: